Recibir un diagnóstico de cáncer de mama puede ser una de las experiencias más angustiosas que puede vivir una mujer. Puede afectar al bienestar psicológico, social, físico y espiritual de la mujer.
Un diagnóstico de cáncer suele provocar pensamientos intrusivos no deseados sobre el cáncer, reacciones emocionales y problemas psicológicos, como ansiedad, desesperanza y desesperación, miedo a morir, sensación de soledad y problemas sexuales y de imagen corporal. Un diagnóstico de cáncer también puede provocar cambios en las relaciones y en la vida de la mujer, así como una disminución general de la calidad de vida.
Se recomienda el uso de estrategias de afrontamiento para empoderar a la mujer que ha recibido un diagnóstico de cáncer y favorecer la adaptación psicológica a la enfermedad y a las complicaciones relacionadas con el tratamiento.
Algunas de las estrategias de afrontamiento más comunes y útiles son:
- Buscar el apoyo social de familiares, amigos, supervivientes de cáncer de mama, paraprofesionales y profesionales.
- Buscar y utilizar estrategias religiosas para afrontar los pensamientos y emociones angustiosos, como hablar con un líder espiritual, leer material religioso y participar en servicios religiosos.
- Expresar las emociones y poner en práctica habilidades de afrontamiento basadas en las emociones, como identificar, reconocer y verbalizar una serie de emociones, utilizar estrategias de atención plena y relajación para hacer frente a esas emociones y/o buscar el apoyo de un profesional de la salud mental.
- Aprender más sobre el cáncer de mama también puede ayudar a tomar decisiones con mayor conocimiento de causa; las opciones incluyen la lectura de publicaciones de fuentes acreditadas, como Susan G. Komen y Cancer Care, y la asistencia a talleres.
- También puede ser útil resolver los retos actuales y futuros. Algunos ejemplos son:
- Obtener información sobre su enfermedad
- Revisar sus objetivos y prioridades
- Considere cómo puede afectar un diagnóstico a sus finanzas
- Mantener un estilo de vida saludable puede mejorar el nivel de energía, lo que incluye mantener una alimentación sana, descansar lo suficiente y participar en actividades placenteras.
El diagnóstico también afecta a la familia del paciente y a sus cuidadores. Los familiares también pueden compartir emociones similares, como conmoción, tristeza, miedo, ira y negación.
Entre las estrategias que los familiares y cuidadores pueden utilizar para hacer frente al diagnóstico de sus seres queridos se incluyen:
- También se anima a los familiares y cuidadores a buscar apoyo social en la familia extensa, los amigos, la iglesia y la comunidad, incluidos paraprofesionales y profesionales.
- También se recomienda a los familiares y cuidadores que aprendan más sobre el diagnóstico del cáncer de mama para ayudar a sus seres queridos a tomar decisiones con la mayor información posible.
- Se recomienda hablar con los niños sobre el diagnóstico de forma adecuada a su edad y desarrollo, ya que los niños pueden rellenar las lagunas con su imaginación.
- Se recomienda que los niños participen en la toma de decisiones relativas al diagnóstico y que sus preguntas y emociones sean validadas y atendidas.
- Se recomienda estar atento a los signos de angustia de los niños en casa y en la escuela.